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La Máscara en el teatro purifica las emociones

Por: Quehacer Cultural

Fecha de publicación: 12/07/2022

El conflicto armado en Colombia desde la mirada poetizada de una familia campesina y los contrastes que se viven en el campo en torno al café, es la puesta en escena que propone el grupo Hurón Teatro de Manizales en su obra “Café Oscuro” mediante el teatro de máscaras, aquel que se inició con los griegos y los romanos y que privilegia la expresión del cuerpo en lugar de la cara.

Sus integrantes: Sergio Naranjo, Bredy Yeins Gallego, Alejandra Oliveros y Geovanny Largo, consideran como colectivo que su función, aparte de artística, debe ir cohesionada con los acontecimientos de su entorno. “Creemos en la paz, y que mejor manera de permitirle al espectador hacer catarsis, recordar para no repetir, en ello vemos el trabajo de Máscara como un vehículo de reflexión y re significación del conflicto armado en Colombia”.

Sergio Naranjo Velásquez es el director de Hurón Teatro, Doctor en Humanidades Magister en Estudios Teatrales y profesor de Artes Escénicas de la Universidad de Caldas, se refiere a la particularidad expresiva que plantea “Café Oscuro”:

“Entendíamos la necesidad de crear una propuesta que permitiera tener una comunicación con el espectador más directa, una propuesta que rompiese con las fronteras idiomáticas cuyo único canal de comunicación fuese lo más universal posible. Encontramos que el cuerpo como lenguaje universal es el instrumento perfecto que permite a cualquier persona, sin importar distingos culturales, intelectuales, económicos, de raza etc. comprender las diversas situaciones y trama de una obra, en este caso de “Café Oscuro” cuyo argumento gira en torno al conflicto armado en Colombia: la historia de una familia de campesinos caficultores que se ven inmersos en la guerra y la venganza, con énfasis en la situación de los niños y sus progenitores, específicamente en el papel de madres. Ante estos acontecimientos, tomamos del teatro clásico la peripecia y de Shakespeare los inequívocos, cambios de fortuna, la anagnórisis como recurso narrativo, que permitiera a los personajes llegar al descubrimiento de datos esenciales de su identidad o del entorno en el que se encuentran, que hasta el momento habían sido ocultos, lo que desencadena repentinos cambios de situación que terminan en desenlaces trágicos”.

La dramaturga, actriz y profesora de la Universidad de Caldas, Liliana Hurtado, descata aquí la acertada utilización de la técnica de la máscara expresiva, poco empleada en el teatro latinoamericano, en una temática tan universal y actual como es la dicotomía entre la guerra y el amor, contextualizada en el paisaje cafetero colombiano:

 

Hurón Teatro nació en el año 2018 con la intención de indagar sobre las estéticas y técnicas en torno al teatro de silencio, gestual, de máscara. Actualmente su desarrollo investigativo y creativo sigue por estas mismas líneas gracias a que el grupo se compone completamente por profesionales en Artes Escénicas y existe dentro del mismo una Tesis de Maestría y una Tesis Doctoral relacionadas con el trabajo de la Máscara en su pre-expresividad y expresividad.

El nombre del grupo se identifica con los hurones pues en su apariencia parecen tener un antifaz, una Máscara, muy adecuado para sus intereses artísticos.

En el primer semestre de 2019 Hurón Teatro realizó una coproducción con Inverso Teatro y Punto de Partida para dirigir “La secreta obscenidad de cada día” de Marco Antonio de la Parra, la cual se estrenó en la versión 51 del Festival Internacional de Teatro de Manizales y actualmente sigue en cartelera.

En el segundo semestre de ese mismo año, explica su director, “el colectivo comprometido con su misión, inicia la creación y producción de su nuevo espectáculo “Café Oscuro”. Resultado de este trabajo continuo obtiene la Beca de Creación Teatral del Ministerio de Cultura y así se consolida su nueva producción, la cual ha recorrido escenarios de varias ciudades del país.

¿Cómo ha recibido el público “Café Oscuro”?
Creería que la palabra correcta sería conmovida, hacer catarsis no es fácil. Tuvimos la experiencia hace poco de un espectador en Chinchiná quien nos dijo que él y su familia habían llorado durante toda la función, como muchos otros espectadores nos lo han mencionado después de las presentaciones. Son emociones que a veces en la ficción del teatro no son fáciles de provocar, el público se identifica profundamente con la obra aun sabiendo que son Máscaras.

Actualmente Hurón Teatro concibe otro espectáculo con Máscaras, por ahora se llama “El Bunker”, “está apenas en proceso de creación, un proyecto que nace con una invitación que tenemos el próximo año a un festival en República Dominicana”, concluye Sergio Naranjo.