Volver

La tragedia de la masculinidad

Por: Rubén Darío Zuluaga Gómez*

Fecha de publicación: 26/09/2021

Obra HOMBRE FLOR. Grupo ANDROMEDA 3.0.

La obra tiene una dirección general y dramaturgia de Daniel Ariza Gómez, apoyada por una investigadora principal, Isabel Hernández Madrid y el coinvestigador Luis Loaiza Zuluaga. Este es un proyecto de investigación creación: “Ayax, el hombre. Visibilizarían de las violencias basadas en genero experimentadas por los varones”. Colabora en este trabajo la Corporación cultural  “A cantaros danza” y es ejecutado por la Universidad de Caldas en diferentes instancias académicas y grupos de investigación.

“Hombre flor” pone sobre el tapete una temática invisibilizada y normalizada en la sociedad como es la violencia sufrida por los hombres en términos de suicidios, guerra, homicidios y maltrato, verificado por las estadísticas y confirmado por la dinámica social diaria. Según la investigación social que sustenta este trabajo artístico transdisciplinar, las múltiples violencias esconden una vulneración al ser masculino, sometidos desde la tierna infancia, obligados a ser machos, a superar su capacidad y resistencia hasta límites insospechados. Ser hombre es una condición que no le permite  expresar sus límites sin vergüenza y reivindicar sus falencias en condiciones objetivas.

Andrómeda 3.0. es un colectivo artístico caracterizado desde sus inicios  por la integración de muy diversas disciplinas, instituciones, formas artísticas y enfoques. Esta puesta en escena aborda la violencia de género haciendo uso de videos de proyección para la presentación audiovisual, su soporte es una pantalla en donde observamos diferentes formas lumínicas, se crean ambientes de recuerdos familiares, juegos de imágenes, sonido,  música incidental, en una propuesta audaz que busca integrar las nuevas tecnologías a la expresión artística.

Los lenguajes analógicos del arte le permiten al grupo salir de la ideologización o único punto de vista, que es lo recurrente en este tipo de casos; esta problemática de tipo social es vista con los ojos de la creación estética, por lo tanto el Hombre flor se constituye en la metáfora de una existencia bella, pasajera y frágil, que está lejos de ser paradigma del soldado que se para derecho, recto, estoico y para el cual la “Lucha libre” pareciera ser su único campo de entrenamiento. El hombre flor va a la intimidad del ser masculino a descubrir sus colores, su miedo, su lado femenino y universal.

El hombre visto a través del lente del arte y con apoyo en las Ciencias Sociales, tiene que ser captado de otra manera, con posibilidades de denunciar un destino preestablecido y miserable, condenado por las estadísticas y la tradición cultural. En este sentido y de manera contundente, “Hombre flor” nos permite de manera novedosa y nunca antes vista, entender la tragedia de la masculinidad, avizorada por los griegos desde Ayax, el héroe suicida que no soporta su propio fracaso y prefiere acabar con su vida antes de enfrentarlo.  El suicida hoy como en todos los tiempos, se enfrenta a sí mismo en la soledad de un paradigma impuesto socialmente, es una lucha intima en la que vence una mirada externa, un desequilibrio nefasto que se cierne sobre la masculinidad y su necesidad de compensación en la muerte.

*Docente Universidad de Caldas.