Por: Octavio Hernández Jiménez*
Fecha de publicación: 15/05/2020
Al detenernos en los óleos que integra este hermoso video da por preguntarse si la muerte humana es de por sí barroca, cargada de una parafernalia constante, un ritual siempre solemne, una belleza tan atrayente como la que observamos en quienes rodean al protagonista de cada escena. Cuando se repite, que es el desenlace natural de toda existencia, vemos que goza de elementos que la tornan convencional, simbólica y para que suceda tienen que confluir ciertos factores inesperados. El arte barroco agudiza ese instante, lo eterniza, trata de embellecerlo para que no espante. La muerte por covid-19 tiene muchos aderezos que la tornan barroca. Estamos, en primera fila, asistiendo a una muerte neo-barroca.