Rosahelena Macía. Engalana la comida montañera

El ajo, el comino y la manteca de cerdo son la base para la mayoría de platos que cocina Rosahelena Macía Mejía. Estos son sus ingredientes principales, sumado a la terquedad que la caracteriza y que la ha llevado a viajar por el mundo y por los 48 municipios del Paisaje Cultural Cafetero entre el 2012 y 2014 en busca de recetas tradicionales, paisajes e historias.

Es guía turística de profesión y por muchos años ejerció su carrera, pero el destino la llevó a la docencia hace 12 años, y sus conocimientos e investigaciones en gastronomía hace 5 años a enseñar cocina colombiana en la Universidad Autónoma de Manizales.

Nació en Cali pero parece caldense por su acento, su forma de hablar y de reírse a carcajadas. Además, la mayor parte de su existencia la ha vivido en fincas cafeteras y en especial en Salamina (Caldas) tierra natal sus padres. Recuerda como una hazaña la vez que cocinó comida colombiana en China. Viajó en mayo del 2018 a la ciudad de Yanati a participar de los World Cookbook Awards por ser una de las autoras del libro Panela, una tradición. De 520 cocineros, Rosahelena estuvo entre los 7 que prepararon distintos platos, la única de latinoamérica. Ese día preparó canastas de papa rellenas con picadillo de chorizo neirano de Maracas, salsa de lulo y ají pajarito, acompañado de chaqueta con panela de Supía y café colombiano. Todavía no se explica cómo pudo llevar en un avión estos ingredientes al otro lado del mundo.

La cocina, el recuerdo de la infancia

Desde los 4 años cocina. Recuerda que a esa edad preparó y dirigió en su casa una torta de naranja con ideas innatas, y todavía no sabe cómo se le ocurrió esa preparación. Y así transcurrió su niñez. Siempre que llegaba a una casa de visita terminaba en la cocina. «Una vez cuando tenía 14 años fui con mis papás a un cumpleaños a una finca en Santa Rosa, ese día estrené un pantalón azul eléctrico y una blusa blanca. Ellos me advirtieron que no cocinara. En esa fiesta prepararon comida árabe, terminé en la cocina y sin delantal. Me ensucié con sangre de cerdo y ese castigo nunca lo olvido», comentó Rosahelena.

El gusto por la comida la ha llevado a preferir, por sus sabores, alimentos sin marca y en especial aquellos que se producen en veredas y municipios de Caldas. «Después de haber viajado por el país uno se vuelve necio. El pionono que consumo tiene que ser de Aguadas, el bocadillo de Vélez, las cucas de Salamina y las colaciones de Supía, las arepas, la panela, la pulpa de mfruta y otros alimentos también son seleccionados», explica Rosahelena.

Para ella el principal aporte que le puede hacer a la gastronomía es la preparación de platos exquisitos con ingredientes montañeros colombianos, aunque eso genere desconfianza entre los comensales. «He preparado cuca con kumis de postre para eventos muy importantes. La cuca se pone abajo y se remoja con ron y panela, encima el kumis con dulce de moras y poleo».

Cuando no está en la cocina escribe. Su producción literaria comprende varios cuentos y poemas, algunos publicados en medios locales, libros y concursos de cuentos. Después de su visita a China entendió que debía aprender inglés y desde este año estudia cada sábado. La pone de mal lgenio lo que llama «la
corrupción en la cocina». No le gusta pellizcar la comida mientras la prepara o que en las entidades públicas sirvan menos de lo justo y presupuestado.

Rosahelena descarta pedir a domicilio. No le gusta el sabor de los masmelos, de la gelatina blanca o las gomitas. Su plato favorito es el que siempre extraña cuando está en el extranjero: tinto con arepa amarilla y hogao. Su hija Alicia Ramírez heredó el amor por la cocina y con ella disfruta preparando postres. Espera seguir viajando para conocer las nuevas maravillas del mundo moderno y ver algún día que a la plaza de mercado de Manizales la declaren Patrimonio de la Humanidad por la vida, la autenticidad, la tradición y la culturaque para ella representa este sitio emblemático de la ciudad.

*Comunicadora Social y Periodista.
Productora Manizales 92.7 FM y 1000 AM.
Subgerencia de Radio – Radio Nacional de Colombia